The Cosmic Wheel Sisterhood es un sueño hecho realidad. El trabajo de un estudio en cuyos estándares se incluyen la perseverancia, el perseguir objetivos y la superación personal. Deconstructeam, creadores de otras bellas obras como The Red Strings Club o Gods Will Be Watching, es un estudio de desarrollo de nuestro país formado por miembros que aman lo que hacen. Jordi de Paco, Marina González y Paula “Fingerspit” nos permiten el lujo de adentrarnos en esta deliciosa encrucijada de brujas, tarot y sueños. Por supuesto, este análisis está repleto de spoilers.
En esta aventura gráfica de toma de decisiones, encarnamos a Fortuna, la bruja adivina. Fortuna forma parte de un colectivo muy antiguo, pero ha sido castigada y desterrada por haber predicho la destrucción de su akelarre. Debe pasar mil años en el exilio, pero nuestra andanza comienza a los doscientos años de su penitencia.
Este castigo no parece importarle tanto a Fortuna como la expropiación de su baraja del tarot, sin la que no puede ejercer sus cualidades de vidente. Por este motivo, conducida por la desesperación, invoca a Ábramar, un bahamut, que es una criatura casi demoníaca más antigua que el propio universo y, por supuesto, anterior a las brujas. Con él, se nos presenta una mecánica nunca antes vista y en la que se basará todo el juego para desarrollar su narrativa: construir nuestra propia baraja del tarot.
En su exilio, Fortuna aprende a crear sus propias cartas con los cuatro poderes elementales. Al principio, se muestra reticente a enseñarlas, pero poco a poco coge confianza en sus cartas y pierde el temor a echarlas a cualquier visitante. Varias brujas van a verla, algunas amigas, otras desconocidas. Entonces, llega un punto en el que se da cuenta del poder que tiene su nueva baraja: cambia el pasado, decide el futuro.
Con la ayuda de Ábramar, iremos añadiendo nuevas cartas, cada vez mejor diseñadas. Veremos cómo algunas brujas vuelven a darnos la razón sobre nuestras lecturas del futuro; otras cambian sus pensamientos si leemos cosas sobre su pasado. Pero, de repente, ocurre un evento que cambiará nuestra forma de verlo todo: Aedana, la bruja madre de su akelarre, ha muerto; deben buscar una nueva líder.
En este momento, da comienzo una campaña de elecciones a las que, por supuesto, nos presentamos como candidatas. Competiremos contra otras brujas, algunas de las cuales serán nuestras amigas y otras no, dependiendo de las decisiones que tomemos a lo largo del juego. ¿Qué ocurrirá el día de las votaciones? ¿Seremos la nueva líder del akelarre? Pase lo que pase, las cartas lo decidirán todo.
The Cosmic Wheel Sisterhood mezcla un pixel art delicado y con alta carga narrativa con una banda sonora envolvente, receta perfecta para crear la carta de tarot que todo lo vale: la Rueda Cósmica. Una de las joyas de este año, sin duda.
